Revolviendo los cajones encontramos los trozos de nuestra historia, pedazitos de sentimientos entre cielo y mar azules, el olor a hierba mojada bajo la luna llena, una mirada entre la cercanía y la lejanía. Un nudo en el estomago, una atracción fatal.
Idas y venidas... por la pasión perdida y sabor a incomprensión.
Lunes, martes, miércoles... pasan los días... un tiempo para borrar lo imborrable.
En el silencio de la noche sigo añorándote, busco entre las sabanas tu contacto, la relajación. Entre convulsiones espero encontrarte, intentando alcanzarte con la respiración entrecortada. Ahora soy yo quien se ahoga, ansiosa por no encontrarte a mi lado.
Yo y mis lágrimas.
Amaramares
06/06/2001
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