martes, 4 de diciembre de 2007

Capítulo XVIII. Silencios


Corren las manecillas del reloj
corren a alta velocidad
el viento arrastra polvo y arena
dejando atrás caras, risas, y nubes
encuentros, salidas, visitas música,
sonrisas y sueños
melancolías perdidas
en el silencio la huida.
Tras los cristales silencio,
tiempo sin palabras, sin sonidos, sin voces
silencio para la soledad
que empieza a apreciarse
costumbre o resignación? no sé...
Hueco vacío sin eco
sorpresa? quizás...
amanecer y atardecer
a alta velocidad
pasan los días, las tardes, las noches
tiempo de silencios
olvidos? quizás...
Caminos, valles, montañas
luces, sombras, estrellas
prados y acantilados
noches sin luz la luna ...
se calla? quizás...

Amaramares
04/12/2007

viernes, 12 de octubre de 2007

Capítulo XVI. SIN DESTINO




La velocidad del viento,

la intensidad de las olas

que arrastran mis sueños.

Qué sueños? ya no sueño....

prados verdes, mar espumoso

a vista de pájaro.

Me alejo... me acerco...

me vuelvo a ir viajes

a ninguna parte

tierra mojada, hojas en el suelo, cielo gris

día sin prisas silencio....

algún pájaro canta

mañana, pasado y el otro...

uno más entre tantos

huecos, recovecos sin llenar

sin destino no se que encontrar

Aparece y desaparece el espejismo

un día más, un día menos, sin camino

sin destino.



Amaramares
12/10/2007

domingo, 30 de septiembre de 2007

Capítulo XV. Añoranza sin esperanza




Perdida en mi silencio
entre risas buscando
en el agua turbia y las piedras
limpiar el barro de mis pies
mi piel quemada por el sol
mirando el cielo limpio de nubes
alma fría, manos tibias
buscando un nuevo calor
miradas desconcertadas
echando a suertes su destino
respuestas indefinidas entre risas,
huecas palabras, el vacío
rumores ilusionados y expectantes
ambiente festivo
sin aureola entre risas,
en silencio, perdida
un abrazo, un beso
sin palabras mirada ida,
en la huida gotas
que resbalan por mi garganta l
a única caricia en mi piel
añoranza sin esperanza alma fría,
entre risas perdida

Amaramares
30/09/2007

lunes, 23 de julio de 2007

Capítulo XIV. Mariposa en la llama




No quería ser otra vez mariposa en la llama pero no podía resistirme, acudí a ella. Llegó deprisa y pude ver de nuevo aquellos ojos extraños, claros pero con mirada oculta.

Quise soñar por una noche y volé una vez más.
Quise creer que era cierto que podía volver a subir muy alto, llego a mí como marea, dulce y tierna.
Me llevó a las estrellas, aquellas ya olvidadas.
Quise creer en ella, ¿Cómo olvidar aquella noche...?
Otra vez una canción en portugués, otra vez unos ojos brillantes con mirada triste,
otra vez quería creer que mi corazón dolido podría revivir.

Riesgos y esperanzas sin confirmar.....
Ella no cree en mi ni yo en ella,
¿Cómo afianzar esa expectativa de llegar al horizonte de ese mar amado por las dos?
¿Cómo volver a soñar? Ella sigue mirando ese cielo estrellado sin saber donde elegir.
Como estrella fugaz deja su estela que yo recojo mientras pasa el tiempo....



Amaramares
23/07/2007