martes, 15 de septiembre de 1998

Capítulo VI. Sus ojos esmeralda nos alumbraron




Sonaba una canción en portugués, la había oído antes, un mantel azul y unas flores violeta. Unas manos sobre la mesa con el impulso de rozarse, unos ojos tristes esmeralda. Yo la miraba intentando llenar aquel vacío que nos unía y separaba a la vez.


Caminábamos por la acera de una calle estrecha, al final una gran avenida que nos dividiría. Miré de nuevo aquellos ojos verdes buscando una luz. Esa luz alumbró la larga avenida y al final de ella, encontramos un lecho de amor... en nuestro nido...


Amaramares
15/09/1998